Buen fin.

A partir de hoy y hasta el lunes 19 de noviembre en mi país se estará llevando a cabo "El Buen Fin". Según la página www.elbuenfin.org este evento fue creado para reactivar la economía fomentando el consumo (mmmm, esto ya no me está gustando). Así mismo, al reactivar la economía, nosotros como consumidores nos beneficiamos comprando todo lo que siempre estamos postergando con los mejores precios del año.

Entiendo la importancia de tener una economía activa, pero ¿de qué sirve activarla en base a dinero que NO tenemos?

La emoción de pensar que estaremos "ahorrando" al realizar la compra nos hace creer que podremos obtener más artículos por la misma cantidad de dinero, lo cual nos lleva a adquirir cosas que no necesitamos o que simplemente no teníamos en mente comprar.

Esa reacción química que se nos activa en el cerebro al hacer cosas que nos hacen felices (aceptémoslo, comprar nos hace felices) muchas veces nos crea la visión túnel, ésa que nos impide comparar precios y elegir lo mejor. Porque en lo que tardamos en ir a otra tienda a checar el costo del mismo artículo, éste puede agotarse y ya no aprovechamos la ganga; así que, lo mejor es comprarla ahora, ¡total, tiene descuento!

Quiero creer que todas las empresas participantes están respetando sus precios normales y en verdad están haciendo un descuento. También quiero creer que todos los consumidores realizaron un pequeño análisis a sus finanzas y, estas compras a meses sin intereses o de contado no les afectará en su economía anual; sinceramente, sé que ninguna de estas dos es real del todo.

¿Qué uno de los objetivos del buen fin es mejorar la calidad de vida de las familias mexicanas? Para mejorar la calidad de vida no se necesita comprar cosas a crédito. Trabajo digno, sueldo justo y educación son sólo unas de las varias cosas que mejoran la calidad de vida de una persona.

¿Queremos un país económicamente más activo?
Apoyemos a las pymes, productores mexicanos, fomentemos el consumo de lo hecho en México, mejoremos las condiciones de trabajo de los empleados, eduquémonos como consumidor a comprar calidad y no cantidad, ofrezcamos buen servicio al cliente y, poco a poco compraremos a conciencia y con responsabilidad durante todo el año, no nada más un "buen fin".

PD. Lo sé, soy idealista, pero nada pierdo con intentarlo.